Si eres un EMPRENDEDOR y …
Quieres convertir tu idea en negocio cuanto antes y no tienes ni idea de cómo empezar. Te das cuenta de que el sistema es muy lento por toda la burocracia que hay. Tienes que presentar papeles y pedir permisos en muchos sitios distintos.
Tu idea es buena, pero necesitas dinero para ponerla en funcionamiento.
Te da miedo equivocarte. Puedes poner en peligro tu patrimonio personal si el negocio va mal o crees que podrías ahorrar impuestos si eliges la fórmula jurídica adecuada.
En el negocio habrá más socios y no están claras las reglas de funcionamiento entre vosotros. En el futuro pueden aparecer conflictos que pongan en peligro el proyecto y hay que dejarlo resuelto desde ahora.
Si tienes una STARTUP y …
Sabes que una multa puede poner en peligro la viabilidad de tu empresa. Quieres hacer bien las cosas y cumplir tus obligaciones fiscales y contables, pero necesitas ayuda. Cuando buscas a alguien que te lo haga bien, tienes la sensación de que nadie entiende el idioma de tu negocio.
El día a día del negocio absorbe todo el tiempo y tener al día las facturas y los bancos supone un problema.
El negocio está creciendo y necesitas contratar empleados. Esto supone más trámites y quebraderos de cabeza para tener toda la documentación en orden.
Hay empleados que no te gustaría que abandonaran la empresa por el talento que tienen y no sabes qué puedes ofrecerles para retenerles. Se te ocurre que puedes hacerles partícipes de la evolución y de los beneficios del negocio, pero no sabes cómo hacerlo.
Llevas mucho tiempo investigando y desarrollando un producto que de momento no genera ventas. Sin embargo, no haces más que pagar facturas y nóminas y la tesorería da lo que da.
El crecimiento del negocio depende de hacer inversiones elevadas.
Quieres aprovechar las ayudas y los incentivos que dan las las Entidades Públicas, pero no sabes cuáles son ni dónde o cómo se solicitan.
Estás en medio de una ronda de financiación y la due diligence es un auténtico calvario. Se han detectado errores contables que pueden poner en peligro el éxito de la operación. Además no dejan de pedirte documentos como un plan financiero o el captable y no tienes ni idea de cómo hacerlo.
Hasta que tu negocio sea próspero y rentable tu obsesión es analizar la rentabilidad de tus productos y la situación de tu tesorería. De esta última depende tu supervivencia.
Te das cuenta de que sin la ayuda de la contabilidad, es imposible que puedas hacer un seguimiento adecuado de sus previsiones de quemado de caja.
Las Startups no analizan su negocio cada tres meses, sino semanalmente. Aporta mucho valor tener los bancos conciliados cada semana y disponer de cierres mensuales intermedios completos
Si tu MODELO DE NEGOCIO …
Está muy especializado porque basa en el comercio electrónico, en el desarrollo de software sobre blockchain, en la minería de criptoactivos o en el desarrollo de NFTs y no encuentras a nadie que comprenda la tecnología.
Necesita financiación y quieres hacerlo con la emisión de token o criptoactivos.
Si eres un INVERSOR que …
Vas a vender tu participación en una STARTUP y el impacto fiscal de la operación puede ser un problema.
Desconoces los incentivos fiscales que hay para la inversión en startups y quieres aprovecharlos.
Cuando vas a invertir, no sabes dónde te estás metiendo y por ello, antes de poner dinero en la mesa, necesitas que alguien de confianza revise los estados financieros.
Has invertido en CRIPTOACTIVOS y, aunque quieres hacerlo bien y ponerte al día, no sabes cómo hacerlo porque no tienes clara la normativa fiscal que te afecta.